jueves, 2 de diciembre de 2010

Y ahora sólo

Y ahora sólo nos queda
saludarnos como esos amigos lejanos
que recuerdan difícilmente lo bueno que han vivido

Saludarnos como cuando se va a un reencuentro de secundaria
saludarnos y ya no sentir nada
y es como si ahora sí viviera un ayer lejano contigo,
esa frase que te gustó y ahora nos representa

Y es curioso, porque nunca hubo un “nos”
y ahora sí lo hay:
Un “no nos conocemos”
un “no nos queremos más”
un “¿nos quisimos?”
un “nos odiamos”
un “no nos debemos ver”
un “nos” que no existe.

Y ahora, confieso, que ya no te quiero;
pero aún queda algo especial
y cada vez que veo a dos tomarse las manos o
sonreír como cómplices
el corazón me exige buscarte

Fuiste mi primer sentimiento real
fuiste todo y nada
nunca fuiste para mí
y yo siempre quise ser para ti

No andábamos sincronizados
andábamos perdidos y nos encontramos
yo te encontré, te vi y te quise
tú te topaste conmigo, te caí bien
y luego quisiste darme un beso.

Yo quise más, quise tu corazón y tu compañía
tú quisiste más, mi inocencia y sólo por pura diversión
Me acuerdo, ¿sabes?
Me acuerdo de todo lo que dijiste, lo que hiciste, lo que prometiste
Pero ahora ya no es nada. Y duele. Ya no tanto, pero duele.

Escrito: Un día de setiembre (esos en los que suelo recordar)

No hay comentarios: