martes, 11 de diciembre de 2012

Para que te vaya bien

Y deslizo mis pensamientos,
suave y callada, pretendiendo.

Y trato de ahogarte
con mi ansiedad, esperando.

Y sigo firme en la lucha
de no dejarte caer, esforzándome

Y veo un incierto acertado,
algo en ti no ha sido descubierto, sospechando.

Y hoy sin querer, recé por ti
para que te vaya bien.

Y hoy debo aceptar que tu
frescura ha reinventado mi alma.


3 comentarios:

Acuarela dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Acuarela dijo...

Me*

Acuarela dijo...

Despedirnos. Ver tus ojos tristes. Prometer que todo saldrá bien. Y que volverás. Despedirnos. Abrazarnos más de 5 segundos. Que se vuelven 10, 20, 30. Tienes que irte. Yo debo disimular. No puedo soltarte. 40, 50, 60. Me miras. Te vas. Cojo tu mano. No puedo dejarte ir. ¿Y si no estás bien? ¿Vas a estar bien? Tu mirada dulce y socarrona. Sin entender por qué, sé que te voy a extrañar. No te has ido y ya es así. Estarás bien. Tal vez no te vuelva a ver. Cuídate. Suelto tu mano. La sonrisa de costado. Me hago la fuerte. Te vas. Las lágrimas están a punto de caer. Ya no estás.