sábado, 21 de abril de 2012

Qué tortura


Qué tortura ver
tu nombre tantas veces
en mi pantalla
clavándose tan en el fondo
recordándome
lo vivido
lo sentido
lo sufrido.

Qué tortura ver
tu indiferencia tantas veces
asesina como ninguna
acribillándome
hasta lo más profundo
rascando la costra
más honda
más grande
más antigua.

Qué tortura ver
reflejadas en mi mente
mis lágrimas suicidándose
aguerridas, cayendo
con tanta determinación
desde mis ojos cansados,
apagados por tanto recordar.

Qué tortura ver
que aún te quiero
que todo vuelve a brotar
que no me ha servido de nada
la experiencia,
la paciencia,
los consejos y “la nueva actitud”.

Qué tortura ver
que todo es una pérdida
de tiempo, de sueños,
de esfuerzos, de sentimientos.
qué difícil eres,
que complicado lo haces todo.

Qué tortura ver
que la anestesia no basta
que el alma no se calma
que no puedo borrar
lo indeleble
que no puedo sacarte
por más que lo intente. 

No hay comentarios: